Se encuentra a unos 340 años luz de la Tierra. El exoplaneta se llama HD 131399Ab y orbita una estrella que es un 80% mayor que nuestro Sol y además lo hace a una distancia enorme, unas dos veces la distancia a la que orbita Plutón. Las otras dos estrellas se encuentran muy juntas girando la una a la otra a la vez que orbitan, al igual que el planeta descubierto, a la estrella central.
El exoplaneta descubierto es un gigante gaseoso con unas 4 veces la masa de Júpiter, su temperatura es de unos 580 grados centígrados, y a pesar de su tamaño y temperatura es uno de los exoplanetas fotografiados directamente más fríos, menos masivos, y es el primero en una configuración dinámica, calificada como "muy interesante", por Daniel Apai, profesor de la Universidad de Arizona e investigador principal de uno de los equipos de la NASA en el Nexus para Exoplanet System Science (NExSS), que es una red interdisciplinaria dedicada a la búsqueda de vida en planetas fuera de nuestro sistema solar.
Además se puede decir que es un planeta bebé ya que se calcula que tiene una edad de sólo unos 16 millones de años. La Tierra tiene 4500 millones de años
El descubrimiento ha sido posible gracias al instrumento Sphere del Telescopio Very Large Muy Grande, situado en el Observatorio Europeo Austral, en Chile.
HD 131399Ab es un gigante gaseoso y por tanto no tiene una superficie sólida; pero es muy posible que tenga lunas; así que si nos imaginamos sobre una de ellas, podríamos ver 3 amaneceres y tres atardeceres. Durante gran parte del año veríamos las estrellas muy juntas, tendríamos noches y días; pero con un triple amanecer y triple atardecer. A medida que el planeta orbita y las estrellas se aproximan llegan un punto en el que el atardecer de una coincide con el amanecer de las otras dos. Así y durante una estación sería constantemente de día; aunque iluminado por distintas estrellas, y esto duraría unos 140 años terrestres aproximadamente una cuarta parte del año; porque en este nuevo exoplaneta el año sería muy, muy largo, unos 550 años terrestres.
- Crédito de las imágenes: ESO/L. Calçada/M. Kornmesser
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